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¿Están los niños preparados para cuidar de sus padres en la vejez?

¿Están los niños preparados para cuidar de sus padres en la vejez?

Tiempo de lectura: 3 minutos

Como hija confieso que no estoy preparada para cuidar a mis padres en la vejez, creo que necesito protegerlos, y hasta creo que ya no pueden estar solos.

Es necesario pensar en otra cosa, es necesario entender la vejez no como un problema, sino como algo que nos presenta nuevas posibilidades, creando nuevos valores, dando importancia a lo que el anciano piensa de la vida y lo que realmente es esencial para ella. yo.

Los niños no siempre comprenden que en el proceso de envejecimiento habrá debilidades, pérdidas, enfermedades crónicas, pero que el viejo yo puede superar.

La familia puede pensar que ya no soy productiva, porque decidí vivir como quiero, ya no me importa lo que piensen los demás, encontré en cada etapa cronológica de mi vejez una razón para mirarme y descubrir que las dificultades, los límites de mi cuerpo, aún se superan.

Soy viejo, todavía tengo el control de mi vida, esta vida es mi biografía, es mi obra de arte.

Yo, el viejo, quiero seguir viviendo donde me sienta conectado con mi historia, encontrarme con mis vecinos para desayunar, salir a pasear con mi coche por el barrio o incluso sacar a pasear a mi perro.

Soy mayor, todavía quiero sentirme activo mientras mi salud lo permita, me encanta hacer las cosas, ya no tengo urgencia, tiempo, personas, mi aprendizaje, mi autoconocimiento me están ayudando a afrontar mi vejez en una manera más feliz.

Es como canta Almir Sater en la canción Tocando em Frente:
«Camino despacio
Porque tenía prisa
Y tomo esa sonrisa
Porque lloré demasiado
Hoy me siento mas fuerte
Mas feliz quien sabe
Solo me aseguro
se muy poco
O no se nada
Conoce las mañanas
Y las mañanas
El sabor de la pasta
Y manzanas
Se necesita amor
Para poder pulsar
Se necesita paz para poder sonreír
Se necesita lluvia para florecer
Creo que la vida plena
Simplemente sé
Entendiendo la marcha

Y sigue jugando… ”

Yo como hija confieso que no estoy preparada, creo que mis padres son vulnerables cuando salen a la calle, veo debilidades, pero parece que no se dan cuenta que ya están teniendo dificultades para moverse, ya se ahogan al tragar algo de comida, se olvidan algunas palabras, creo que necesito protegerlos, creo que ya no pueden estar solos.

¿Cómo puedo prepararme para comprender la fragilidad de mis padres y valorarla positivamente?

A medida que envejecemos, nos volvemos únicos. Es natural que la familia ante la fragilidad intente imponer necesidades que no son de nuestros padres.

Actuamos con naturalidad, protegiéndolos, tomando decisiones que nos favorecen a los familiares y terminamos olvidando que es necesario escucharlos, escucharlos, pero con delicadeza, con espíritu liviano, con respeto, resaltando posibles heridas. , entendiendo el tiempo del otro y luego sí, cuando sea necesario, asumiendo el rol de cuidar, sí de los padres.

A menudo, será necesario que el miembro de la familia busque conocimientos prácticos para poder prestar una atención adecuada ante una mayor fragilidad al final de la vida.

Respetando una decisión que se puede tomar a través de un testamento vital, nunca debemos olvidar que la vida debe vivirse con dignidad en cualquier etapa y debemos hablar primero con nuestros padres para saber cuáles son sus deseos, cómo quieren morir mientras todavía tienen el control de la vida. Y si el momento es para nosotros de revertir roles con nuestros padres, es necesario que asumamos la responsabilidad, con mucho cariño, así les estamos permitiendo que se mantengan conectados con lo que todavía les proporciona lazos afectivos y felices y quitando el sufrimiento en la etapa más frágil. de vejez.

Silvia Americano – Licenciada en administración, carrera desarrollada en las áreas de planificación y comercial. Actualmente opera en el mercado de la tercera edad, con venta de servicios de teleasistencia – botón de emergencia de la empresa Telehelp, que permite el contacto directo con las personas mayores y la necesidad de buscar conocimiento constante para comprender el proceso de envejecimiento. Texto redactado para el curso Fragilidad en la Vejez: Gerontología Social y Atención, impartido por Cogeae (PUC-SP), en el primer semestre de 2018. Correo electrónico: E-mail: silvia2606@hotmail.com