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Hay una soledad entre las personas que, sin tiempo para hablar y expresar sus ideas y emociones, son prisioneras de los celulares, las computadoras y el apuro diario sin tener la oportunidad de expresar y comprender sus sentimientos y los de los demás …
Tengo 84 años, soy viuda y vivo sola. Tengo un par de hijos que solo aparecen cuando me enfermo o el día de la jubilación. Me siento triste por esta vida, mis hijos y nietos están ocupados y siempre tienen prisa ”.
Ser educado emocionalmente es ser capaz de lidiar con las emociones para desarrollar su poder personal y lograr calidad de vida. Según Steiner (1998) la educación emocional se forma a partir de tres habilidades: la capacidad de comprender las emociones, escuchar a otras personas y empatizar con sus emociones y ser capaz de expresar las emociones de manera productiva. El mundo moderno, a través de los nuevos medios de comunicación, está obstaculizando de alguna manera este diálogo emocional entre seres humanos de todas las edades.
Hay una soledad entre las personas que, sin tiempo para hablar y expresar sus ideas y emociones, son prisioneras de los celulares, las computadoras y el apuro diario sin tener la oportunidad de expresar y comprender sus sentimientos y los de los demás …
En mi experiencia clínica en la clínica y en el cuidado del anciano en una institución de larga duración, esta dificultad en el uso de la inteligencia emocional está provocando un aislamiento intergeneracional, con varios efectos en generaciones, provocando aislamiento y desacuerdos, ya que no hay diálogo emocional.
El envejecimiento satisfactorio depende del equilibrio entre el potencial y las limitaciones del individuo. Las necesidades de autorrealización y crecimiento personal no disminuyen con la edad, pero pueden verse afectadas cuando el individuo enfrenta limitaciones en actividades y habilidades en múltiples dominios y cuando experimenta estrés psicológico. Además, los individuos psicológicamente bien adaptados tienen una mejor capacidad para adaptarse a las demandas y dificultades sociales y emocionales (Neri & Resende, 2009).
Ser emocionalmente inteligente es aprender a tener un sentido de ajuste psicológico constituido a partir de la interacción entre oportunidades, las condiciones vividas por el individuo (salud, trabajo, vivienda, educación), la forma personal en la que cada uno organiza sus conocimientos y responde a las necesidades individuales. necesidades., demandas sociales y ambientales (Queiroz, 2003).
A través de la práctica en la atención psicogerontológica individual o grupal, podemos estimular el autoconocimiento y fortalecer las actitudes y patrones emocionales constructivos en la mejora de la calidad de vida y la satisfacción existencial.
El apoyo emocional a las personas mayores promueve el esclarecimiento de las emociones y fomenta nuevas posibilidades para enfrentar los conflictos cotidianos y sus relaciones interpersonales.
A cualquier edad y momento existencial, podemos mejorar nuestro bienestar emocional con un nuevo sentido de propósito en la vida y de fortalecimiento de nuestro poder personal.
¡¡¡Aquí vamos!!!
Referencias
STEINER, C.; PERRY, P. Educación Emocional. Objetivo Editorial. Río de Janeiro 1998.
Neri, AL y Resende, MC (2009). Ajuste psicológico y perspectiva de la vejez personal en adultos con discapacidad física. Psicología en estudio, 14 (4): 767-76.
Queiroz, Carolina del Norte (2003). Bienestar psicológico e inteligencia emocional en hombres y mujeres de mediana edad y vejez. Tesis de Maestría en Gerontología. Campinas (SP): Facultad de Educación. Universidad Estatal de Campinas.